lunes, 13 de abril de 2015

Enchufados al Sol

Vivimos en un mundo donde, desde que suena el despertador, estamos usando electricidad como principal energía para nuestros asuntos diarios. Y aunque damos por hecho que apretando un botón tenemos a nuestra mano todo lo que queramos, ¿como es esto posible?

Como ya habéis visto en entradas anteriores, nuestro proyecto Profundiza para este curso 2015 está enfocado al alumnado de primaria (en mi caso particular, nos ocuparemos en general de 3º curso), y esto nos descubre la visión que tienen sobre asuntos cotidianos que nunca han llegado a plantearse. Han escuchado muchas veces hablar de la energía solar, del petróleo, las centrales nucleares, etc., pero ¿que han captado de toda esa información que les rodea?



De esta manera preparamos unas fichas con distintos recursos energéticos y, por grupos, dejamos que explicaran la idea que tienen de ellos. ¿El resultado?

Pues del viento sabían que produce energía eólica mediante los molinos, del agua que ya antiguamente se utilizaban molinos de agua para utilizar esa energía hidráulica, del sol que puede calentarse agua con placas solares, y con la tierra y la energía geotérmica tenían un poco menos de idea.

Frente a estos recursos, que entran dentro del ámbito de renovables y nos parecen respetuosas con el medio ambiente (en general, claro) se contraponen claramente ya los recursos fósiles o contaminantes. ¿Cuales?


La madera con la deforestación y sus humos, el carbón y el petróleo con sus vertidos y emisiones contaminantes, y el uranio radiactivo. Claro está han hecho la vida más cómoda, pero su uso extendido ha provocado unos daños en el planeta que, sin esfuerzo de nuestra parte, pueden llegar a ser irreversibles.

Entre las explicaciones que dimos después de recoger sus impresiones hicimos un inciso para aclarar que muchos de estos recursos se utilizan para hacer funcionar turbinas y, a través de ellas, transformarlos en electricidad. De esta forma los molinos de agua, de viento, las presas, las centrales térmicas son, en su simplificación, turbinas.

Y con las turbinas nos pusimos manos a la obra.

 

Gracias a que son todo unos expertos en montaje, propusimos varios modelos en los que el movimiento se realiza gracias a energía hidroneumática, es decir, por sistemas de agua a presión.

     

Diferenciando entre los que podían reciclar el agua usada al hacerla pasar a través de una turbina y los que se propulsaban con el agua a chorro, todos juntos pudimos comprobar la potencia de los vehículos y aprendimos que, como cualquier energía, hace falta esfuerzo para conseguirla. ¡Menudos brazos hicieron Mario, Lucas y Víctor para conseguir suficiente presión en las botellas!




Tras estas carreras, y a la espera de enseñarles algunos ejemplos mas en próximas sesiones, retomamos experiencias previas y jugamos convirtiéndonos en conductores de electricidad para hacer música ¿tienes curiosidad por verlos de nuevo en acción?


PD: Los modelos ensamblados son algunos de los que contiene el juego "Vehículos hidráulicos" de Buki, por si os interesa probar en casa. Fáciles de encontrar.

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